viernes, 13 de septiembre de 2013

Mejorar el rendimiento con tarjetas Nvidia (controladores privativos)


Desde hace unos días he tenido el impulso de probar el funcionamiento de algunos juegos "windowseros" que yacían inanes en una estantería. Los resultados de este experimento, bastante esperanzadores, ya os los he contado en otra ocasión; ahora toca echarle un vistazo a algunos trucos para exprimir al máximo el rendimiento de nuestras tarjetas gráficas. No hay milagros, pero sí algunas mejoras. Algo bastante positivo en un ámbito, el de la aceleración 3D, bastante atrasado en el mundo Linux. De momento, claro... la esperanza es lo último que se pierde, y tal.
Antes de nada, tengo que ser justo y darle el mérito de este vídeo a quien se lo merece, es decir, la fuente: en este caso he encontrado la información en la magnífica página Desde Linux, a cuyos autores debemos estarles agradecidos todos los linuxeros novatos. Para no limitarme a hacer un corta y pega de los consejos aportados en el artículo que enlazo, he añadido algunas apreciaciones personales sobre la configuración de los controladores privativos de Nvidia, basados sobre todo en mi experiencia diaria; no soy un usuario intensivo de la aceleración gráfica (tengo épocas jugonas, pero esta no es una de ellas) y generalmente lo que más me interesa es evitar aberraciones visuales como el tearing, que molestan mucho al ver películas. De todas formas, alguna vez sí que echo partidillas, y si se puede conseguir algún frame por segundo cambiando cosillas, siempre es de agradecer.

En cuanto a los comandos para cambiar la configuración de rendimiento, os los dejo a continuación, para que podáis cortar y pegar cómodamente; debo señalar, aunque ya lo hago en el tuto, que alterar esta configuración y pasarla a máximo rendimiento supone un cambio muy importante en el consumo eléctrico de vuestras máquinas, así que advertidos quedáis; por consiguiente sólo aconsejo que experimentéis con estos comandos si sois usuarios intensivos de videojuegos. De otro modo, las mejoras gráficas no compensarían el gasto eléctrico y el calentamiento del sistema. Una vez hechos los avisos pertinentes, os dejo los códigos:


1. Primero editamos el archivo de configuración de xorg; elegiremos el archivo correcto (ver vídeo) con uno de los dos comandos siguientes:
sudo gedit /etc/X11/xorg.conf
sudo gedit /etc/X11/xorg.conf.d/20-nvidia.conf
2. A continuación añadimos una de las siguientes configuraciones a la sección "device". Elegiremos la configuración en función del tipo de sistema que tengamos:


# "adaptive" para cualquier fuente de energía
Option "RegistryDwords" "PowerMizerEnable=0x1; PerfLevelSrc=0x2233; PowerMizerDefault=0x3"


# batt=max ahorro de energía, AC=max ahorro de energía 

Option "RegistryDwords" "PowerMizerEnable=0x1; 
PerfLevelSrc=0x3333"


# batt=adaptive, AC=max rendimiento 
Option "RegistryDwords" "PowerMizerEnable=0x1; PerfLevelSrc=0x3322; PowerMizerDefaultAC=0x1"


# batt=max ahorro de energía, AC=max rendimiento 
Option "RegistryDwords" "PowerMizerEnable=0x1; 
PerfLevelSrc=0x2222; PowerMizerDefault=0x3;
PowerMizerDefaultAC=0x1" 


# batt=max ahorro de energía, AC=adaptive 
Option "RegistryDwords"
"PowerMizerEnable=0x1; PerfLevelSrc=0x2222; PowerMizerDefault=0x3; PowerMizerDefaultAC=0x3"

Como veis, las diferentes modalidades responden sobre todo a los casos en que tengáis un portátil funcionando, de forma que podemos variar el comportamiento energético de nuestra gráfica en función de si el portátil está o no conectado a la red eléctrica. Lamentablemente no he podido probar todas estas configuraciones, pues no tengo un portátil con tarjeta Nvidia (tengo un netbook que no sé por qué pero sigue funcionando el jodido maldito). 
En cualquier caso, sí es cierto que se consiguen ciertas mejoras, sobre todo en juegos corriendo bajo Wine, de forma que hay que agradecer el truco a los chavales de Desde Linux. Eso sí, echadle un vistazo a la temperatura del equipo de vez en cuando, y sobre todo a la factura de la luz, no vayamos a tener un drama casero...

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